TIPOS DE IMPRESORAS III. PLOTTER E IMPRESORAS 3D.

PLOTTER.

También llamados impresoras de gran formato. Existen varios tipos de plotter: los que solo imprimen, los que solo cortan y los que hacen ambas cosas.

Los plotter de impresión se utilizan para imprimir planos, fotografías de gran tamaño, cartelería, rotulaciones, etc. Los plotter de corte tienen dos funciones: para cortar vinilo de corte de colores, y para cortar formas ya impresas en un plotter de impresión. Los plotter mixtos, como bien dice su nombre, permite trabajar ambas funciones, impresión y corte, como por ejemplo, pegatinas.

Desde sus inicios, el plotter se utilizaba en estudios de arquitectura para imprimir planos, normalmente monocromáticos. Pero con los avances tecnológicos, ya no solo se han implementado multitud de variedades de tintas, sino que también el soporte donde se imprime aparte del papel, como vinilo o lona, y en otros materiales para la personalización de prendas, objetos, fotografía profesional o anuncios publicitarios retroiluminados, etc.

Actualmente, estas impresoras siguen pensadas para gráficos profesionales, como fotografía profesional, planos para estudios de arquitectura e ingeniería, cartelería para la industria publicitaria, packaging, materiales para sublimación textil, etc.

La ventaja de este tipo de impresoras es que ofrece rapidez a la hora de realizar impresiones de gran formato de alta calidad como fotografías en color de alta resolución o grandes carteles.

Con todo lo descrito anteriormente podemos ver la diferencia entre las impresoras de inyección de tinta más comunes y el plotter. Lo primero, es que el plotter imprime en formatos de gran tamaño, mientras que las impresoras de inyección de tinta pueden llegar a imprimir hasta en formato A3. Y otra diferencia es el formato del papel, donde las impresoras de inyección de tinta imprimen en formato hoja, mientras que el plotter imprime en formato rollo o bobina para poder trabajar en grandes formatos.

IMPRESORAS 3D.

Las impresoras 3D crean objetos sólidos en tres dimensiones.

La mayoría de las impresoras 3D comerciales o destinadas a uso no profesional son de dos tipos según el método utilizado: compactación o adición. En el primer caso se compacta por estratos una masa de polvo, mientras que en el segundo se inyecta el material por capas.

Para poder imprimir en 3D y crear piezas o maquetas hay que partir de un diseño por ordenador en dos dimensiones, es decir, una representación digital de lo que se va a imprimir en 3D. Estos diseños se realizan con programas informáticos específicos de modelado.

¿Cómo se imprime en 3D? Los materiales utilizados son diversos y dependen del modelo de la impresora. Por ejemplo, las impresoras más asequibles suelen imprimir con varios tipos de polímeros, generalmente materiales termoplásticos como el PLA o ABS (dos tipos diferentes de filamentos). En cuanto a los modelos más caros imprimen usando fotopolímeros, metal o resina líquida.

¿Qué se puede imprimir en 3D? Desde objetos caseros, instrumentos musicales, material e instrumental médico, implantes, piezas de arquitectura y construcción, piezas aeronáuticas y aeroespaciales, y más.

Pero donde está destacando más en los últimos años es en la fabricación de prótesis médicas, ya que permite adaptarse a las características exactas que necesita cada paciente.

Esperamos que os haya interesado este post.